Corrían los años 80. Era un chaval y me interesaban mucho los arácnidos, ya me había leído la enciclopedia de casa y subrayado todo lo referente a los arachne.
En la ciudad sabia donde encontrar las falsas viudas, las arañas lobo y las de tela de embudo….
Y cada vez que salía con mis padres de vacaciones aprovechaba lo mas mínimo para ampliar conocimientos y contactos con el mundo arácnido.
Total, un freaky de los animales “raros”.
En mi ciudad había una plaza “La plaza mayor”, como en todos sitios, con una peculiaridad. Era en el casco antiguo, oscura y lúgubre con todas las casas alrededor de fachadas de piedras antiguas sin reformar y arboles sexagenarios de cortezas rugosas y hondas.
En cada casa el bajo era una tienda, una era pescadería, otra carnicería, al lado un almacén de frutas, al lado una lechería y así hasta dar la vuelta. En aquella plaza había mucha vida de insectos carroñeros como moscas, avispas, cucarachas y mas moscas.
Ósea, un oasis para los depredadores como las arañas. Allí ente las oquedades de los árboles y las paredes vivían multitud de Segestriidae, al principio no las ves, pero con el tiempo empiezas a ver sus túneles de tela azulada. Algunas radiales de entrada otras con varios metros de pasadizo….
Yo creo, después de los años que convivían varias colonias entre S. florentina y Ariadna spinipes.
Pues ahí voy….. total que el ayuntamiento decidió remodelar el casco antiguo, mantuvo el centro de la plaza a cambio de remodelar las casas y “limpiar las fachadas”, talar los árboles y replantarlos con ejemplares más jóvenes y lo más importante dejar que se circulara en vehículo.
Cuando me entere, decidí empezar a recolectar arácnidos….. ( feo, ya lo se ) con el fin de poder mantenerlos y reintroducirlos , cree un tronco en el patio de casa y con un taladro mi padre lleno de agujeros que traspasaban de un lado al otro. Lo enrejamos y cada día que podía al salir de cole antes de ir a casa me pasaba por la plaza y me dedicaba a sacar arañas y guardarlas en probetas ante los ojos asustados de los paletas.
Y ahí empezó el problema, con 15 años no puedes dedicarte a ser el salvador del mundo. Acabaron las obras y yo ya llevaba casi un año con más de 40 Segestrias y Ariadnas que son las que mantuve para poder reintroducir en el mismo lugar, la menos otras 100 o 150 las solté en un bosque muy húmedo al lado de unas fuentes que hay en un pueblo cercano de las de casa tuve más de un 30 % de bajas pues por lo de siempre… fugas incontroladas, canibalismo….. etc.. etc..
Total que un día al soltar una Ariadna, se tiró y en vez de caerse entre la hojarasca como suelen hacer…. Se cayó entre mis dedos y me arreo un bocado de cojones en donde se juntan los dedos índice y anular. No les dije nada a los de casa porque se hubiera acabado la repoblación y le di la culpa a una avispa del barro…. Total aquello me duro rojo casi una semana y quemaba que te ….c
Actualmente de lo que reintroduje no queda nada solo han sobrevivido las colonias del bosque y la de la fuente.