A no ser que tus hijos se acuesten a las 3-4h de la madrugada, no le verán ni la cola ... Es lo que me comentaba una compañera que tenía una pareja, y que los terminó vendiendo porque ni los veía. Son muy nocturnos, y los de ella, ni siquiera salían al anochecer (como por ejemplo, una chinchilla).
Y no sé, comprar una cobaya teniendo ya un conejo, pues no sé qué decirte ... ¿qué pasa, no les gusta el conejo y quieren otra cosa? Si el conejo ya es suficientemente mono, suave, manipulable (si lo acostumbras, si no, te arañará para que lo bajes) y además, mucho más limpio que una cobaya, que cagará por toda la jaula, mientras que a los conejos puedes incluso ponerle una bandeja para gatos en su jaula y trapos viejos en el resto, aprenden a defecar en el mismo sitio facilitándote mucho más la limpieza. Y son listos, aprenden palabras (porque he visto al conejo de mi amiga, que yo esto no me lo creía). Una cobaya es mucho menos inteligente. Y teniendo perro ... pues ya es una mascota estupenda para los niños, además del conejo.
También podías pensar en la chinchilla, erizo ... es otra cosa diferente.
Yo tuve hamster de pequeña (no el ruso, que muchos muerden sí o sí) sino el típico gordo sirio, macho ... y más que como un pan, era como un bollo de mantequilla, de gordo y de manso (la hembra era más movida). Jamás me mordió, se me dormía en las manos, era muy salado. Además tienen menos uñas que las ratas. Lo único es importante respetar su sueño de día y sacarlo ya por la tarde. Su desventaja con respecto a los jerbos es que requiere mucha más limpieza. Pero yo un jerbo no te lo recomendaría para niños si quieres que se esté quieto en sus manos, pero como mascota son mil veces mejor, no huelen, ni muerden y son bastante diurnos. Yo he regalado jerbos a compañeras de trabajo que tienen hijos de edades similares a los tuyos e incluso más pequeños, ya avisándoles de su comportamiento inquieto, y están todos encantados.
Aunque yo como mascota cariñosa e inteligente, quitando a gato y perro y a hurón (por el olor), prefiero mil veces a las ratas. Si las has criado como alimento vivo, ni has interactuado con ellas, ni has visto las preciosas variedades que hay, ni seguramente hayan sido seleccionadas por su carácter, pues es normal que tus niños o tú no las veáis como mascota.
Yo no las conocía, pero al final me decidí por dos hembritas, llevo apenas unos meses con ellas, y mi opinión sobre las ratas como mascota ha cambiado enormemente. Bicho más cariñoso, inteligente y dócil, es impresionante. Te las puedes llevar subidas en el hombro, jugar con ellas, enseñarles cosas, reconocen tu voz y las órdenes. Ojalá vivieran más años, porque es sorprendente el cariño que se les coje.
Ya nos contarás qué decides!
Un saludo!